Preparación
1. Preparar la crema pastelera:
- Calienta la leche en una olla con la vainilla (y ralladura de limón si usas).
- En un bol, bate las yemas con el azúcar y la maicena hasta obtener una mezcla suave.
- Vierte un poco de la leche caliente sobre la mezcla de yemas para temperarla, luego añade todo nuevamente a la olla.
- Cocina a fuego medio, revolviendo constantemente hasta que espese.
- Retira del fuego, cubre con papel film tocando la superficie (para evitar costra) y deja enfriar.
2. Preparar la masa de cannoli:
- Mezcla harina, azúcar, sal y cacao en un bol.
- Añade la mantequilla y mezcla con los dedos hasta que parezca arena.
- Incorpora el huevo y el vino, y amasa hasta obtener una masa suave.
- Deja reposar la masa 30 minutos cubierta con film.
- Estira la masa bien fina y corta círculos u óvalos. Enróllalos sobre moldes de cannoli y sella los bordes con un poco de huevo batido.
- Fríe en aceite caliente (180°C) hasta que estén dorados y crujientes. Escurre sobre papel absorbente.
3. Montaje:
- Una vez que todo esté frío, rellena los tubos de cannoli con la crema pastelera usando una manga pastelera.
- Espolvorea con azúcar glas y, si quieres, decora los extremos con chips de chocolate, pistachos picados o frutas confitadas.
Consejos y trucos:
- No rellenes los cannoli con demasiada anticipación, o perderán su textura crujiente. Hazlo justo antes de servir.
- Puedes hacer la crema pastelera el día anterior y conservarla en la nevera.
- Si no tienes moldes de cannoli, puedes usar tubos de metal o improvisar con papel aluminio enrollado firmemente.
En resumen:
Estos cannoli con crema pastelera casera son una combinación perfecta de texturas y sabores: crujientes, suaves, dulces y delicadamente aromatizados. Un postre que eleva cualquier ocasión especial y te transporta directo a una pastelería siciliana sin salir de casa.
Perfectos para sorprender a tus invitados o darte un capricho con sabor italiano.
anuncio