Método de preparación
Preparar las verduras: Ralla el calabacín, la zanahoria y la patata. Coloca el calabacín en un colador y presiona para eliminar el exceso de agua.
Mezclar los ingredientes: En un bol, combina el calabacín, la zanahoria, la patata, el ajo picado, el huevo y la harina. Mezcla bien hasta obtener una masa homogénea.
Formar los rollitos: Con las manos húmedas, toma porciones de la mezcla y forma pequeños rollitos.
Cocinar: Calienta un poco de aceite en una sartén y fríe los rollitos a fuego medio hasta que estén dorados por todos lados. También puedes hornearlos a 200°C durante 20 minutos si prefieres una opción más saludable.
Servir: Retira los rollitos y colócalos sobre papel absorbente. Sirve calientes con la salsa de tu preferencia.
Consejos para servir y almacenar
Puedes acompañarlos con una salsa de yogur, una mayonesa de ajo o una salsa de tomate casera.
Se pueden almacenar en un recipiente hermético en la nevera por hasta 3 días.
Si quieres guardarlos por más tiempo, congélalos antes de freírlos y cocínalos directamente desde el congelador.
Variantes
Versión con queso: Añade queso rallado a la mezcla para un toque más cremoso.
Con especias: Prueba agregando cúrcuma, pimentón o hierbas provenzales para un sabor más intenso.
Horneados en vez de fritos: Si prefieres una opción más ligera, hornéalos en lugar de freírlos.
FAQ
¿Puedo hacerlos sin huevo?
Sí, puedes sustituir el huevo por una cucharada de linaza molida mezclada con agua o por puré de patata.
¿Se pueden hacer al horno en lugar de freír?
Sí, horneándolos quedan crujientes y deliciosos con menos grasa.
¿Puedo agregar otros vegetales?
Por supuesto, puedes probar con espinacas, champiñones o incluso maíz para darles un toque diferente.
Estos rollitos de calabacín son una opción perfecta para cualquier momento del día. ¡Anímate a probarlos y sorprende a todos con su increíble sabor!