Instrucciones:
Preparar la Base:
Precaliente el horno a 350°F (175°C).
En un tazón, mezcle las galletas trituradas con la mantequilla derretida (y el azúcar si lo usa) hasta que la mezcla esté bien combinada.
Presione la mezcla en el fondo de un molde para cheesecake (de 9 pulgadas) forrado con papel pergamino.
Hornee durante 8-10 minutos o hasta que esté dorada. Deje enfriar mientras prepara el relleno.
Preparar el Relleno:
En un tazón grande, bata el queso crema con el azúcar y la vainilla hasta que esté suave y cremoso.
Agregue los huevos uno a uno, batiendo bien después de cada adición.
Incorpore la crema para batir y mezcle hasta que esté bien combinado.
Divida la mezcla de queso crema en dos tazones. En uno de los tazones, mezcle el puré de frutas o el chocolate derretido.
Vierta la mezcla de queso crema en el molde preparado, alternando entre las dos mezclas para crear un efecto marmoleado. Use un cuchillo o un palillo para hacer remolinos en la mezcla y crear el patrón marmoleado deseado.
Hornear:
Coloque el molde en una bandeja para hornear con agua (baño María) para evitar que el cheesecake se agriete.
Hornee durante 50-60 minutos o hasta que el centro esté casi firme (debe moverse ligeramente en el centro).
Apague el horno y deje el cheesecake dentro con la puerta entreabierta durante 1 hora.
Enfriar y Servir:
Retire el cheesecake del horno y deje enfriar a temperatura ambiente.
Refrigere durante al menos 4 horas o preferiblemente toda la noche.
Decore con frutas frescas o un glaseado ligero si lo desea antes de servir.
El Cheesecake Marmoleado es un postre elegante y delicioso que combina la suavidad del cheesecake con un atractivo efecto marmoleado, perfecto para cualquier ocasión especial o para disfrutar en cualquier momento