Preparación:
Preparar el caramelo:
En una sartén o cacerola pequeña, calienta el azúcar y el agua a fuego medio, revolviendo ocasionalmente, hasta que el azúcar se disuelva y el caramelo tome un color dorado.
Retira del fuego y agrega la mantequilla. Revuelve bien.
Vierte el caramelo en el fondo de un molde redondo para pastel, distribuyéndolo uniformemente.
Colocar la piña:
Sobre el caramelo, acomoda las rodajas de piña de manera decorativa.
Coloca una cereza en el centro de cada rodaja si deseas un toque más colorido.
Preparar la masa del bizcocho:
Precalienta el horno a 180 °C (350 °F).
En un tazón grande, bate la mantequilla y el azúcar hasta obtener una mezcla cremosa.
Añade los huevos uno a uno, batiendo bien después de cada adición.
Incorpora la vainilla y mezcla.
En un recipiente aparte, tamiza la harina, el polvo para hornear y la sal.
Agrega los ingredientes secos a la mezcla de mantequilla, alternando con la leche, comenzando y terminando con los ingredientes secos. Mezcla hasta obtener una masa homogénea.
Montar el pastel:
Vierte la masa sobre las rodajas de piña y alisa la superficie con una espátula.
Hornear:
Hornea el pastel en el horno precalentado durante 40-50 minutos o hasta que, al insertar un palillo en el centro, éste salga limpio.
Voltear el pastel:
Retira el pastel del horno y deja enfriar durante 10 minutos.
Pasa un cuchillo por los bordes del molde para despegar el pastel. Coloca un plato grande sobre el molde y voltea cuidadosamente para desmoldar.
Servir:
Deja enfriar un poco antes de cortar. Sirve tibio o a temperatura ambiente.