Pasos
1. Precaliente el horno a 350°F (175°C) y engrase dos moldes para pastel redondos de 9 pulgadas.
2. En un tazón mediano, mezcle la harina, el polvo para hornear y la sal.
3. En un recipiente grande aparte, bata la mantequilla ablandada y el azúcar granulada hasta obtener una mezcla suave y esponjosa.
4. Bata los huevos, uno a uno, seguido del extracto de vainilla.
5. Agregue gradualmente los ingredientes secos a la mezcla de mantequilla, alternando con la leche. Comience y termine con los ingredientes secos.
6. Divida la masa uniformemente entre los moldes preparados y alise las superficies con una espátula.
7. Hornee durante 25-30 minutos o hasta que al insertar un palillo en el centro de los pastelitos, éste salga limpio.
8. Deje que los pasteles se enfríen en los moldes durante 10 minutos, luego transfiéralos a una rejilla para que se enfríen por completo.
9. Una vez que los pasteles se hayan enfriado, esparce la crema de vainilla uniformemente sobre la parte superior de una de las capas del pastel.
10. Coloque la segunda capa de pastel encima de las natillas, creando un sándwich.
11. En un recipiente apto para microondas, derrita las chispas de chocolate y la crema espesa juntas en intervalos de 30 segundos, revolviendo hasta que quede una mezcla suave.
12. Vierta el ganache de chocolate sobre la parte superior del pastel, dejando que gotee por los lados.
13. Alise el ganache con una espátula, si es necesario, para crear una capa uniforme.
14. Refrigerar el pastel durante al menos 1 hora para permitir que el ganache se asiente.
15. Corte y sirva la tarta Boston Cream fría para obtener mejores resultados.
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