Instrucciones:
En un bol grande, mezcla la leche tibia, el aceite, la levadura y la sal. Añade un poco de harina y mezcla bien hasta formar una masa pegajosa.
Agrega poco a poco el resto de la harina, amasando con las manos hasta que la masa quede suave y se despegue del recipiente.
Cubre con un paño y deja reposar durante 15 minutos.
Divide la masa en dos partes iguales. Extiende una de las partes con un rodillo sobre una superficie limpia y enharinada, formando un rectángulo.
Unta una capa de salsa de tomate sobre la masa extendida.
Cubre con lonchas de jamón de pollo.
Añade una capa de queso mozzarella por encima.
Distribuye el requesón de forma uniforme.
Espolvorea orégano seco al gusto.
Dobla ligeramente los bordes de la masa y luego enrolla como si fuera un brazo gitano, asegurándote de que quede bien sellado.
Repite el proceso con la otra mitad de la masa.
Coloca los panes en una bandeja para horno previamente engrasada o con papel vegetal.
Lleva al horno precalentado a 180°C durante aproximadamente 20-25 minutos, o hasta que estén dorados por fuera.
Retira del horno, deja enfriar ligeramente y sirve.