Preparación:
Hidrata el coco rallado si usas coco seco: agrégale un poco de agua tibia por 10 minutos y escúrrelo bien.
En un recipiente grande, mezcla el coco con la leche condensada y la leche entera hasta obtener una consistencia cremosa.
Añade esencia de vainilla si deseas un toque más aromático.
Lleva la mezcla al refrigerador durante al menos 2 horas para que enfríe y se compacte ligeramente.
Sirve frío, decorando al gusto con coco extra, cerezas o una pizca de canela.
Consejos para servir y conservar:
Sirve en vasitos o copas individuales, decoradas con frutas o toppings para una presentación más atractiva.
Ideal para servir en reuniones familiares, cumpleaños o como postre ligero después de una comida.
Se conserva bien en el refrigerador por hasta 4 días, siempre en recipiente cerrado.
No se recomienda congelar, ya que la textura del coco puede cambiar al descongelarse.
Variantes:
Con leche de coco: Reemplaza la leche entera por leche de coco para intensificar el sabor tropical.
Versión light: Usa leche condensada sin azúcar y leche descremada.
Cocada con frutas: Añade trocitos de piña, mango o pasas para darle un giro frutal.