Preparación:
1. En una olla de fondo grueso, mezcla la leche, el azúcar y el bicarbonato de sodio. Si usas la vaina de vainilla, córtala a lo largo y agrégala a la mezcla.
2. Calienta a fuego medio, revolviendo hasta que el azúcar se disuelva completamente.
3. Reduce el fuego y cocina a fuego lento, removiendo ocasionalmente para evitar que se pegue al fondo de la olla.
4. A medida que la mezcla se reduce, comenzará a espesar y a adquirir un tono dorado. Este proceso puede tomar entre 1 y 2 horas.
5. Cuando el dulce de leche alcance la consistencia deseada, retíralo del fuego y retira la vaina de vainilla si la usaste.
6. Vierte el dulce de leche en frascos esterilizados, deja que se enfríe antes de cerrarlos y consérvalos en el refrigerador.
Consejos para servir y almacenar:
Almacenamiento: Guarda el dulce de leche en un recipiente hermético en el refrigerador. Se mantendrá fresco hasta por dos semanas.
Forma de servir: Úsalo como relleno para alfajores, en panqueques, como cobertura de helados o simplemente disfrútalo con una cuchara.
Variantes:
Con leche condensada: Cocina una lata de leche condensada en baño maría durante 2-3 horas para obtener una versión rápida.
Dulce de leche vegano: Sustituye la leche entera por leche de coco o almendras y usa azúcar moreno para darle un toque especial.
Con un toque de café: Agrega una cucharadita de café instantáneo al final de la cocción para un sabor único.
FAQ:
1. ¿Por qué se usa bicarbonato de sodio?
El bicarbonato ayuda a prevenir que la leche se corte durante el proceso de cocción y a darle el color característico al dulce de leche.
2. ¿Qué hacer si queda demasiado espeso?
Añade un poco de leche caliente y mezcla hasta alcanzar la consistencia deseada.
3. ¿Es necesario usar vainilla?
No, pero la vainilla potencia el sabor y añade un aroma delicioso.
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