La portulaca es perfecta para canastas colgantes, jardineras y macetas al sol—¡y sus flores de colores te van a sorprender!
¿Qué es la portulaca?
La portulaca (Portulaca grandiflora) es una planta suculenta que crece hacia los lados y ama el calor y el sol. Tiene hojas gruesas que guardan agua y flores muy brillantes. Es diferente a la portulaca comestible que a veces se ve en el campo. Esta se usa solo para decorar.
Es originaria de Sudamérica, pero ahora se planta en jardines de todo el mundo. En climas cálidos puede vivir más de un año. En lugares fríos, solo vive una temporada, pero a veces vuelve a crecer sola al año siguiente.
¡Unas flores, muchos colores!
Una cosa linda de la portulaca es que puede tener flores de varios colores en una sola planta. Algunas tienen flores rosadas, amarillas, naranjas y blancas todas juntas. Hay flores con rayas o colores mezclados como un remolino.
Las flores se abren con el sol y se cierran por la tarde o cuando está nublado. Si hay muchos días de lluvia, es normal que no se abran hasta que vuelva el sol.
¿Por qué es tan buena para macetas?
La portulaca crece muy bien en espacios pequeños y con poco cuidado. Mira dónde puedes usarla:
Canastas colgantes: cuelga y deja caer sus ramas con muchas flores.
Jardineras: se llena rápido y no invade otras plantas.
Macetas bajitas: no necesita mucho espacio.
Caminos o jardínes secos: le va bien en suelos pobres o con piedras.
Ya sea un balcón chiquito o un patio grande, siempre hay lugar para una portulaca.
Cuidado fácil, sin complicaciones
Esta planta es muy fuerte. De hecho, si la riegas demasiado, se puede dañar.
Sol: necesita mucho sol. Entre 6 y 8 horas al día es lo ideal. Si tiene sol por la mañana, florece mejor.
Riego: deja que la tierra se seque entre riegos. No le gusta tener las raíces mojadas.
Tierra: usa tierra que drene bien. Si tiene algo de arena, mejor.
Abono: no es necesario. Si quieres, puedes darle un poco una vez al mes en verano.
Flores viejas: muchas veces se caen solas. Pero si las quitas, podría florecer más.
Cuando ya está bien plantada, soporta días de mucho calor sin problema. Si se ve triste por el sol fuerte, dale un poco de agua y se recupera rápido.
¿Cómo plantar portulaca?
Puedes empezar con semillas o con pedazos de la planta:
Semillas: siembra cuando ya no haya riesgo de heladas.
Tallos: corta una ramita, quita las hojas de abajo y ponla en agua o tierra. Saca raíces fácilmente cuando hace calor.
Si quieres tenerla todo el año, puedes ponerla en una maceta y llevarla adentro en invierno, cerca de una ventana con sol.
Ideas bonitas para usarla
Como es bajita y cuelga, puedes usarla de muchas formas:
Combina varios colores en una sola canasta para un efecto arcoíris.
Bordea un jardín soleado para que se vea más vivo.
Planta en macetas colgantes si no tienes mucho espacio.
Usa recipientes originales como tazas viejas o cajones de madera.
Combina con otras plantas como petunias o pastos altos.
Su forma de crecer es perfecta para darle vida a cualquier rincón.
Atrae a las abejas y mariposas
Si quieres ayudar a los polinizadores, esta planta es ideal. Las abejas y mariposas aman sus flores abiertas y coloridas. Les gusta visitarlas por la mañana, cuando están más activas.
Tener estas visitas hace que otras plantas también se beneficien.
Nota rápida sobre la comestible
Hay otra variedad de portulaca, conocida como verdolaga, que sí se puede comer. Se usa mucho en ensaladas, sopas o guisos. Si quieres saber más, puedes leer nuestro artículo sobre esa variedad.
La portulaca de la que hablamos en este artículo es diferente. Esta no se come, se usa para decorar con flores muy coloridas.
Algunas cosas a tener en cuenta
Aunque es fácil de cuidar, hay que saber esto:
Se riega sola: a veces lanza semillas y crece de nuevo sin avisar. A algunas personas les gusta eso, a otras no tanto.
Mascotas: no es tóxica, pero si tu perro o gato la muerde, podría darle un poco de malestar.
Solución de problemas
¿No florece? Tal vez le falta sol.
¿Hojas blandas? Puede tener demasiada agua o tierra muy húmeda.
¿Se ve triste de día? Es normal con mucho calor. Dale agua y se mejora.
¿No abren las flores? Si está nublado o llueve, espera a que salga el sol.
Pensamientos finales
Si buscas una planta alegre, colorida y fácil de cuidar, la portulaca es perfecta. Le encanta el calor, no necesita mucha agua y llena tus macetas de flores.
Crece bien con otras plantas, no exige tierra buena y ayuda a los insectos que polinizan. Ya seas principiante o experto, seguro te va a gustar. ¡Crece sola y se ve hermosa!